Hoy hace un año desde que la
dieta Mediterránea fue inscrita por la UNESCO en la Lista representativa del
Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en su reunión celebrada en
Nairobi (Kenia), el 16 de Noviembre de 2010.
La dieta Mediterránea es una
manera de entender la vida y de alimentarse que se basa en los productos de la
agricultura local, en recetas y formas de cocinar propias de cada lugar transmitidas
de generación en generación, en comidas compartidas, celebraciones y
tradiciones.
Todo esto unido a la práctica de
ejercicio físico moderado pero diario completa ese estilo de vida que la
ciencia moderna nos invita a adoptar en beneficio de nuestra salud.
Los beneficios de la Dieta
Mediterránea sobre la salud y su papel en la prevención de muchas enfermedades
crónicas son hoy por hoy una evidencia científica.